Por lo que robé de los tejados
En un papel mal doblado yace inerte sobre tus manos mi despedida
mi ausencia será voluntaria
como el rocío que decide bañar a las flores del mal
En un papel mal impreso se enredan los versos que mataría por escribir
seguirás siendo estrella vespertina
escondida en la falsedad de un cielo amanecido
En un papel manchado pintaré con mi vida un árbol
y a su sombra esperaré que lo deshaga la furia de tus lágrimas
o que lo ilumine el profundo mar negro de tus pupilas
Volveré a plegar mi vida para ti
para caber en tu bolsillo
y viajar a tu lado imperceptible a sus sentidos
cuando él vuelva sobre ti como lluvia o aguacero
Mas no temas, mi fulgurante dama central
porque estaré a tu alcance
vagaré por los tejados buscando acompañar mi soledad
tomaré a un patán por maestro
mientras tú haces de tu esencia
autoenseñanza propia de naturaleza prístina
Tan solo pido que no renuncies a reinar en mi noche
con la mirada súbita y única
que no deja de ser luz
de siete millones de años atrás
<< Home